Refugee Children Welcome es el mensaje que hemos colocado en la fachada del Colegio Echeyde I de Santa Cruz de Tenerife.
La tragedia de los refugiados, forzada por un conflicto bélico, demuestra la ineficacia de las administraciones europeas para atajar un problema que dura más de cinco años.
Con motivo de la celebración de la IV Jornada Multicultural, hemos querido destacar que la mitad de los doce millones de refugiados son niños. Todos ellos han perdido la posibilidad de vivir en paz, pero sobre todo, están intentando alcanzar un espacio para crecer sanos y salvos. Un espacio que no encuentra más alambradas y puertas cerradas.
La Unión Europea, sus países miembros y demás naciones tienen suficiente capacidad para atender la demanda de asilo, para facilitar el exilio desde los puntos de origen, sin necesidad de que estos niños arriesguen sus vidas zarpando en lamentables embarcaciones.
Los niños y las niñas que escapan de la guerra no pueden ser demonizados. No entienden por qué los mayores luchan por el petróleo, por tener control sobre los territorios y las personas que allí siempre han habitado. No entiendes de política, ni de enfrentamientos.
Merecen ser el futuro. Deben de crecer arropados por el cariño de sus familias, amigos y vecinos. Deben aprender que entre las diferencias siempre hay puntos de encuentro. Y que, a pesar de los estereotipos, clichés y marcas, en realidad todas las personas piensan igual, viven igual.
Una acción individual, como la que proponemos desde la fachada del edificio de nuestro centro educativo, puede hacer llegar el mensaje a lugares lejanos. Queremos sensibilizar a la comunidad del Colegio Echeyde y hacerles partícipe de este mensaje que pedimos trasladen a amigos y familiares.
Practicamos la tolerancia. Aceptamos las diferencias. Valoramos la generosidad. Respetamos a los demás. Enseñamos la solidaridad. Sumamos, nunca restamos. Aprendemos y compartimos.