El pasado 2 de abril se conmemoró el Día Mundial de la Concientización sobre el Autismo, con un mensaje de transformación hacia una comprensión del autismo integrada dentro de un mundo neuro-inclusivo, proponiendo incorporar el Paradigma de la Neurodiversidad, cambiando la narrativa de la cura o la normalización del autismo para aceptar, incluir, dar ajustes y defender los derechos de las personas autistas.
Este paradigma trasmite que las personas tenemos cerebros diferentes y estos se agrupan según características comunes. El tipo de cerebro mayoritario es el neurotípico (neurológicamente típico) y las demás formas (neurotipos) componen la neurodivergencia (aquello que diverge del cerebro considerado «normal»).
El concepto de Neurodiversidad permite considerar las características neurológicas, sensoriales, comunicativas y sociales de las personas autistas como diferencias naturales en su desarrollo, de esta manera la consideraríamos una IDENTIDAD.
Nadie puede decidir ser autista, nadie puede volverse autista. Por ello es una IDENTIDAD. Define la manera en la que se percibe nuestro mundo y se actúa con él.
De esta manera y a nivel profesional, se hace necesarias comunidades educativas con una visión antropológica del autismo, que puedan percibirlo intentando captar su lógica y su forma de vida. Reconocer formas de afecto diferentes de lo socialmente establecido, compartir objetos inusuales, estructurar las acciones de la vida diaria, anticipar informaciones aparentemente obvias… es respetar la IDENTIDAD autista. Por tanto, al convivir con personas neurodiversas nos alejaremos de la idea de pretender que, en algún lugar escondido, en un bunker subterráneo, hay un cerebro “normal”, neurotípico.
No nos conformemos con la inclusión, busquemos la convivencia y el respeto. Un mundo pertenece a todos los que habitamos en él. Porque como dice mi admirada amiga Olga Alegre, “Quizás educar en la diversidad simplemente sea educar en la sensibilidad y en la calidad, como una orquesta, donde ningún instrumento sobra, donde todos suenan distintos, pero todos aportando el valor de su diferencia, que enriquece al conjunto de la humanidad”
Sergio Delgado – Aulas Enclave