Despierta curiosidad, podría ser el lema de esta interesante actividad complementaria destinada a los estudiantes de Primero de Educación Primaria.
Sin lugar a dudas los niños necesitan experimentar con la realidad y probar cosas nuevas. La unidad didáctica dedicada a los alimentos dio pie a pensar qué se podría hacer para despertar la curiosidad del alumnado de primero de educación primaria.
La ocurrencia fue utilizar los propios recursos del colegio, atendiendo a una clase de preparación de alimentos frescos en la cocina del colegio Echeyde de Santa Cruz, y complementar la actividad con una visita a una pizzería. Todo esto durante la semana del 9 al 13 de noviembre.
Despierta cursiosidad: La curiosidad es un gran motor para nuestra felicidad.
Hemos de prestar atención a esta capacidad de los niños y las niñas de cuestionar todo lo que ocurre a su alrededor. Tienen un enorme potencial para absorver a través del experimento y la manipulación, por lo que la actividad docente ha de poseer un plano práctico que se consigue vía las actividades complementarias de esta índole.
Las tareas programadas ayudan a pensar y a atraerlos hacia intereses que les rodean. Todas las familias utilizan alimentos a diario y los cocinan. Uno de los objetivos es, por tanto, buscar puntos de conexión entre la materia que se imparte y la realidad de cada alumno.
Con la ayuda de los profesionales que han intervenido han recibido información curiosa, han manipulado los alimentos pero también han observado cómo se manipulan.
A los estudiantes les encanta desconectar de la rutina diaria de clase y mejor con actividades en las que pueda ver cosas nuevas y estar con sus amigos del aula por ello hemos de concebir alguna tarea diferente a las habituales, más sofisticadas o que realmente sea interesante para los niños.