A lo largo de la vida vamos llenándonos de experiencias que van marcando nuestra forma de ser.
Cuando somos jóvenes no nos damos cuenta, pero nuestro paso por el colegio influye de una forma muy importante en las personas que nos convertiremos en el futuro.
Mi nombre es Yoné. No solo soy profe de prácticas, también soy un antiguo alumno de esta maravillosa familia, “la familia Echeyde”. Cuando era pequeñito me eduqué entre estas paredes y aprendí los valores del respeto, el compañerismo y la solidaridad que tanto caracterizan a nuestro centro.
Tiempo después, seguí creciendo fuera del colegio, llevando con orgullo al Echeyde allá donde iba. Ahora que finalmente acaban mis estudios para ser maestro, he tenido la oportunidad de poner fin a esta etapa de mi vida en la misma escuela que me vio crecer y con la misma gente que me acompañó en el camino. Por ello, tengo más claro que nunca que “el
mejor viaje es el de vuelta a casa”.
Para ti, querid@ alumn@, tengo un mensaje que decirte. ¡Valora y agradece por todo lo que tienes y esfuérzate por mejorar cada día! En tu día a día hay muchas cosas que te parecen insignificantes, pero que en realidad están dejando una huella imborrable en tu corazón. Por ejemplo, esos momentos de risas y diversión con tus amigos en el patio, las enseñanzas de ese profe que siempre te ayuda a dar lo mejor de ti, esas situaciones difíciles de convivencia con tus compañer@s que hacen que el grupo esté más fuerte y unido…
Todos estos pequeños detalles son las vivencias que van a forjar la persona en la que te convertirás en el futuro. Por eso, me conformo con dejar en ti esta enseñanza, el más importante de todos los aprendizajes: “Para ser feliz, es fundamental ser buena gente, agradecer por todo lo que nos da la vida y persistir en nuestra ilusión por superarnos a nosotr@s mism@s cada día”.
Te deseo lo mejor en tu vida. Con mucho cariño:
Yoné