El huerto escolar como recurso educativo puede utilizarse en todos los niveles. Es una herramienta para crear múltiples experiencias de aprendizaje para el alumnado.
El huerto escolar como recurso didáctico puede utilizarse en todos los niveles educativos. Es un excelente recurso para convertir a los centros escolares en lugares que posibiliten múltiples experiencias de aprendizaje a las niñas y los niños. Esta opinión de la FAO la compartimos plenamente, puesto que en el Colegio Echeyde conocemos esta experiencia gracias a los huertos escolares que utilizamos como escenario de aprendizaje.
Desde nuestra experiencia el huerto escolar es una motivación para alumnos y alumnas puesto que es un medio novedoso, vivo y que se transforma con el paso de los días, las semanas y las estaciones.
Se trata de una manera de estudiar práctica, que no requiere tener un nivel específico de conocimientos para trabajar y que ofrece valores positivos, promueve el aprendizaje e incluso puede utilizarse para mejorar los conocimientos sobre alimentación y nutrición o respeto al medio-ambiente.
El huerto escolar como recurso didáctico amplia los conocimientos que se adquieren en el aula. Es una herramienta valiosa para dar respuesta o soluciones a las dudas que puedan plantearse en el aula o desde el aula a cualquier edad.
Además podemos trabajar otros temas transversales como Educación Ambiental, Educación para la Salud, Educación en Derechos Humanos, Educación del Consumidor, Educación en Valores, Coeducación, etc.
Estos aspectos favorecen la integración del alumnado a través de compartir la experiencia entre compañeros sin necesidad de competir, o demostrar que se sabe más o menos. Es muy motivador y fomenta el diálogo, la capacidad de experimentar, interpretar, llegar a sus propias conclusiones u obtener resultados.
Con el trabajo en el huerto escolar buscamos obtener los siguientes resultados:
- Estimular la capacidad de observar, formular preguntas e investigar.
- Elevar y mantener el interés y la curiosidad.
- Confrontar y contrastar de manera pacífica sus ideas e hipótesis.
- Ayudar a formular explicaciones de lo observado.
- Inducir a diseñar actividades y proyectos propios.
- Permitir el desarrollo y socialización al trabajar en equipo.
- Contribuir al desarrollo emocional saludable, que es inseparable del desarrollo intelectual e integral de las niñas y los niños.